A palabras necias, oídos sordos.

A palabras necias, oídos sordos.

Mis Complicaciones Favoritas

A world so hateful some would rather die than be who they are

11.12.21

Ultimátum

He vuelto a ese punto de autodestrucción. A suplicar, a no querer estar sola. Siento rabia y tristeza al mismo tiempo. Siento temor por aquello que viene, por algo que pasó. Siento celos porque algo en mi interior dice: mediocre, mediocre, mediocre. Que cualquiera estaría lejos si fuese posible. Que nadie me quiere, que nadie me aprecia, que cualquiera cambiaría nada por mí. Un cero a la izquierda, una mala suerte que se cruza por el camino. ¿Debo dejarlo ir? Si todo el mundo se da cuenta, en mis ojos, en mi expresión, en mi ser. Quiere irse, irse lejos, dejarme aquí. No puede más, no puede ni mirarme a los ojos. ¿Es otra oportunidad por pena? Volvemos al bucle, al inicio de todas mis pesadillas, de todos mis recuerdos, de todo mi dolor. Se repite la historia, el no soportarme, el dejarme ir. Se repite aquello que me hizo temer, que me hizo dudar de mí misma. Aquella relación tóxica que me volvió a mí insoportable. Las dudas, las malditas dudas. ¿Quién va a quererme a mí si hay mil peces en el mar? ¿Quién podría elegirme a mí? Y si ahora doy pena. Otra oportunidad y doy pena, me deprimo y ya no puedo decir lo que pienso, lo que siento, lo que soy. Ya no podré reprochar nada, ¿es esto lo que me merezco? Porque no soy mezquina, no hay maldad en mí que no sea hacia mí misma. ¿Y por qué todos huyen? ¿Por qué nadie quiere estar a mi lado? ¿Por qué no soy especial para nadie? Y me late el corazón a mil por hora, porque no puedo soportarlo, porque tengo mil y un problemas en mi cabeza que afectan a mi mirada, a mis gestos, a mi ser. Y yo no quiero ser así. Quiero ser libre, libre con alguien. Que me demuestre que valgo la pena, que me bese hasta quedarse sin labios, que me haga sentir especial, que no me haga sentir una más, una cualquiera, que no me haga ser así. ¿Es mucho pedir? Que me quieran con mis virtudes y mis defectos, con todo, con todo su corazón. Que dé todo por mí. ¿Es ese amor de película real o es una ficción creada para entristecerme? ¿Soy yo la única que se siente así? Que siente ese vacío inmenso, que nota que no hay nada, ni siquiera yo misma, que pueda solucionar el problema que soy yo, entera. Porque nadie me quiere entera. Me quiere callada, sumisa, sin sentimientos. Me quiere como “amiga de”, “novia de”, “esa”, “¿quién?”. Y eso me pregunto yo: ¿quién soy? ¿soy yo misma ante ojos ajenos a los míos? ¿soy yo misma ante mis ojos? Porque me veo al espejo y desearía ser otra persona. Desearía desaparecer. ¿Qué sería el mundo sin mí? ¿Mis padres merecían que yo naciese? ¿Por qué yo? ¿Por qué se decidió que yo sí? ¿Se decide? Y soy atea. Soy atea porque si hubiera Dios no me hubiera elegido a mí, aquí, en un mundo privilegiado. Nadie me hubiera elegido a mí. Ni siquiera yo. MSC